¿Por qué digitalizar permite captar más capital?
18 dic 2025
Win-win promotor-inversor
Con una valoración que alcanza los 12,5 billones de dólares en 2024, el mercado inmobiliario profesional se mantiene como uno de los activos más grandes del mundo, según el informe de MSCI “Real Estate Market Size 2024 — Global Analysis”.
Y, sin embargo, su gestión no está digitalizada. Hablamos de un sector que aún no ha logrado integrar y conectar la información con un “tablero digital” que reúna los datos en un solo lugar, para facilitar la manera en que se da visibilidad a los proyectos en los que invertir.
Esta dinámica, en más de una oportunidad, hace que incluso las mejores operaciones pierdan capital. No por falta de proyectos, sino por falta de una estructura que permita dar visibilidad a la inversión de manera estratégica: captar más inversores y mostrar los resultados en un dashboard integrado.
La digitalización cambia ese escenario: al reducir los tiempos de validación y centralizar la información, acelera la toma de decisiones y mejora el flujo de capital hacia los proyectos que están listos para ejecutarse. La eficiencia no solo se traduce en orden, sino también en oportunidades que antes se perdían por falta de agilidad.
La brecha digital que decide qué proyectos reciben inversión
Ante un proyecto increíble y único que llega justo cuando el equipo ya está gestionando múltiples oportunidades y no tiene capacidad para mostrar una más, contar con una plataforma como Ratio cambia las reglas: puedes presentar ese nuevo proyecto en simultáneo al manejo de toda la cartera.
Además, la posibilidad de acceder a los inversores del Club Privado de Ratio amplifica su visibilidad hacia una nueva red, evitando tener que salir a buscar capital al mercado.
La digitalización facilita la realización de las tareas cotidianas, evita superposiciones y amplifica la capacidad de trabajo, reduciendo riesgos y fricciones.
Ya no hace falta limitarse a los pocos proyectos que tu equipo puede manejar: con Ratio, la tecnología amplía tu capacidad de gestión y de crecimiento.
Estamos ante un sector en el que gran parte de los inversores trabaja con sistemas tecnológicos automatizados, por lo que exigen precisión, transparencia y rapidez, mientras que los mecanismos de gestión que aún utiliza el mercado inmobiliario se han convertido en una carga que frena el crecimiento.
Procesos que restan competitividad
Procesos manuales: cuando cada operación financiera, cada modificación de costes o cada avance de obra depende datos aislados y correos manuales, el margen de error sube, los retrasos se multiplican y la desconfianza crece
Reporting lento: los bancos, family offices o inversores esperan datos claros y oportunos. Si tardas semanas en producir un informe fiable, pierde legitimidad.
Compliance complejo: el proceso de validación de inversores (KYC, AML, revisión de contratos) padece de procesos repetitivos y puede generar demoras de meses, algo que se evita con la digitalización.
Efecto final: hay proyectos sólidos que no logran convencer al capital porque la forma —la presentación, la transparencia— no acompaña al fondo.
Según el informe de Plan Radar,“Digitalización en el sector de la construcción e inmobiliario”: “El 77 % de las empresas del sector inmobiliario y de la construcción en España considera todavía difícil o muy difícil la introducción y desarrollo de avances relacionados con las nuevas tecnologías en su negocio”.
La digitalización como puente entre promotores e inversores
El reto no es la falta de proyectos, sino que la gestión transmita la transparencia y agilidad que el capital espera. – Nicolás Araujo Müller, cofundador y CEO de Ratio.
Hoy los promotores cuentan con proyectos sólidos y atractivos. El capital, por su parte, está disponible y busca oportunidades. El desafío aparece en el medio: en la forma en que se gestionan y presentan los proyectos.
El sector no falla por falta de proyectos, sino porque los datos no siempre circulan con la fluidez que se requiere. Frente a inversores que ya trabajan con sistemas automatizados y esperan reportes en tiempo real, los mecanismos manuales terminan generando dudas y retrasos. No porque los proyectos carezcan de valor, sino porque la forma de mostrar la información no logra transmitir la misma confianza que pide el capital.
La digitalización actúa aquí como un puente: convierte datos dispersos en trazabilidad, orden y claridad. Permite que los inversores vean el potencial sin distracciones ni dudas, y que los promotores puedan dedicar más tiempo a lo esencial: hacer crecer sus proyectos.
Para el inversor, además, la digitalización representa control y seguridad: acceso constante a métricas reales, visibilidad sobre el avance financiero y certeza de cómo se utiliza su capital. Esta transparencia reduce la incertidumbre, acelera decisiones de reinversión y refuerza la confianza mutua que sostiene cada proyecto.
Lo que puedes ganar al digitalizar
Digitalizar no significa cambiar todo de golpe ni perder el control. Significa sumar una capa de confianza que facilita la relación con el capital.
KYC/AML digitalizados: validación de inversores en minutos mediante plataformas seguras y auditables.
Contratos y firma digital: acuerdos cerrados sin dependencia de papel ni desplazamientos físicos.
Reporting automático a stakeholders: todos —bancos, inversores, socios— ven la misma versión, sin cortes ni retrasos.
Menos fricción: los reportes no dependen de cadenas de correos ni de recopilar versiones. Todo fluye en un único tablero.
Más legitimidad: al mostrar trazabilidad en cada paso, el proyecto se percibe más seguro y atractivo para bancos e inversores.
Más capital: la transparencia y la agilidad abren puertas a inversores que, de otra manera, elegirían proyectos con estructuras más claras.
El diferencial de Ratio: mucho más que software
Ratio no es una herramienta aislada: es la plataforma que integra todo el ciclo de la promoción inmobiliaria en un solo sistema.
Deal room + data room + dashboard financiero: información centralizada, clara y actualizada en tiempo real.
APIs de conexión con contabilidad, bancos, CRMs y sistemas operativos: cero fricciones, máxima trazabilidad.
Pasarela de cobros y pagos integrada: distribución automática de rentabilidades, sin errores humanos.
Comercialización digital desde el inicio: preventas validadas antes de entregar la obra, reduciendo riesgos.
📍 Caso real — Espronceda: se estructuró el modelo financiero del proyecto y se captó capital mediante preventa retail.
El uso del modelo digital permitió reducir el tiempo de captación en un 50 % y cerrar la preventa tres meses antes de lo previsto
Una rentabilidad anual del 16%, con un retorno total de 32,2% con un horizonte de inversión de 2 años.
👉 Ver caso desarrollado en detalle.
La visión: por qué importa
El capital ya no se conquista con maquetas ni promesas: se gana con confianza y transparencia.
En el siglo XXI, la digitalización no es un lujo: es el idioma que hablan bancos, family offices e inversores. Aceptar esta realidad permite evolucionar de “alguien que construye” a un socio estratégico.
Porque el verdadero cimiento de un proyecto hoy no son solo los ladrillos: también son los datos.


